Contenido creado por Gerardo Carrasco
Salud

Qué veo cuando me veo

Rechazo hacia el propio aspecto comienza a edad temprana, revela estudio

El rechazo de una persona hacia su aspecto o el percibirse más gordo de lo que se es puede comenzar a edad tan temprana como los 8 años.

23.07.2014 12:02

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2014-07-23T12:02:00-03:00
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El disgusto de una persona por su imagen corporal o el verse más gordo de lo que realmente se es no comienza como un fenómeno que acompaña la "coquetería" de la pubertad.

Una investigación hecha por el Gobierno australiano con más de 4.000 niños en edad escolar reveló que esta disconformidad puede aparecer a edad tan temprana como los ocho años.

Los investigadores entrevistaron a todos los muchachos y les preguntaron si se consideraban delgados, normales o con sobrepeso, y cuál era la imagen corporal que les gustaría tener.

Del estudio se desprende que dos de cada cinco menores con edades entre 8 y 11 años deseaban ser más delgados. Sin embargo, esto incluye a menores que tenían algún nivel de sobrepeso.

Entre quienes más bien tenían bajo peso, el 16% de las mujeres y el 11% de los hombres querían ser más delgados aún. En los participantes de 10 y 11 años, esta tendencia era mayor que en cualquier otro rango etario.

El reporte también señala que el 50% de quienes deseaban ser más delgados son hijos de madres que se preocupan por el peso propio y, por esa razón, suelen ingerir poca grasa y hacer mucho ejercicio.

Tal situación preocupa a los investigadores, quienes lanzan una alerta pues las consecuencias de estas inquietudes pueden ir más allá de la faceta nutricional. "Estudios anteriores han demostrado que niños que no están felices con su cuerpo son más propensos a seguir dietas poco saludables, a usar esteroides y a hacer actividad física en exceso", expresan los autores del estudio, según cita el periódico Nación.

"Las dietas y el ejercicio excesivo pueden llevar a otros problemas como fatiga y problemas en articulaciones y huesos. Esto, a su vez, conduce a una autoestima todavía más baja. Además, pueden combinarse con otras conductas de riesgo, como relaciones sexuales a muy temprana edad, autoagresión e intentos de suicido" indican los resultados del estudio.