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Cultura

Persona y personaje

Con el cineasta español Santiago Segura, invitado a los Premios Platino de Punta del Este

“La gente en la calle cree que soy un guarro como Torrente”, afirma el cineasta español Santiago Segura, una de las estrellas invitadas a los Premios Platino de Punta del Este.

24.07.2016 02:34

Lectura: 8'

2016-07-24T02:34:00-03:00
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Por Gerardo Carrasco
  gcarrasco@m.uy

Si bien en la carrera como cineasta y actor de Santiago Segura puede hallarse de todo como en botica, su gran éxito en su España natal y fuera de ella lo debe a la serie de películas del personaje José Luis Torrente. Interpretado por el propio director, Torrente es un ex Policía venal, fascista, machista, toxicómano, desagradable y los adjetivos peyorativos podrían continuar. Un verdadero crápula que ha hecho reír a millones a lo largo de cinco cintas que se cuentan entre las más taquilleras de la historia del cine español.

Segura es una de las estrellas invitadas a los Premios Platino de Punta del Este, y este domino conducirá la gala de premiación junto al mexicano Adal Ramones y nuestra Natalia Oreiro.

"Los premios Platino son una idea muy bonita y rezo para que se consolide de alguna forma, aunque lo veo muy complicado, porque pretende ser un reconocimiento o premio al cine iberoamericano, y el cine iberoamericano es muy variopinto, pero no es una industria compacta como sí lo es Hollywood", dijo el cineasta en rueda de prensa en nuestro principal balneario. "Yo en este momento no sé quién es el actor venezolano más famoso", ejemplificó.

"Los que viajamos tenemos más posibilidades de conocer lo que se hace en otras partes, pero la mayoría del público no. Por ejemplo, en España hace años que no se estrena una película mexicana. Creo que el último éxito mexicano fue ‘Y tu mamá también' ya hace más de una década. Prefieren hacer un remake", lamentó.

"Uno de los grandes desastres que impiden viajar a nuestro cine es el doblaje. O sea, Arnold Schwarzenegger habla español y con perfecto acento castellano, y se le entiende todo, creo que ese es el gran hándicap que tenemos", consideró.

"Yo tengo la suerte de estar viajando y hace poco trabajé en una serie para Globo (Supermax) donde había actores mexicanos, argentinos, cubanos, y un uruguayo: César Troncoso. Él es uno de los actores más conocidos de Uruguay y yo no tenía idea hasta ese momento. Me avergüenza mi incultura, pero es que tenemos ese problema: no hemos sabido crear un star system, y es lo que quisiera que los Premios Platino ayudaran a construir", expresó.

Para reforzar esa idea de cierta falta de cohesión en el ámbito del cine latino, pone como botón de muestra lo que pasa en estos mismos premios. "Las cinco películas son muy buenas, pero nadie las ha visto todas, conoces mucho más de los Óscar. Los presentadores van nombrando a los ganadores y tú dices ‘¿quién es ese, quién es ese otro?' Y sucede que son desconocidos, algo que no te pasa cuando te muestran a Ryan Gosling o Jennifer Aniston. Han conseguido vendernos su star system y los admiro y respeto por ello, pero ya vale, ¿no?"

En cuanto a lo que vuelca de sí en personajes como Torrente, Segura responde con su habitual sentido del humor, y también con sinceridad: "No hay absolutamente nada. Yo soy una persona sensible, interesada en la estética, y esos personajes son fruto de mi gran labor actoral, porque soy un gran actor. Y soy tan buen actor que la gente en la calle cree que soy un guarro como Torrente, que soy hincha del ‘Aleti', que me gusta la música del Fari, y gracias a Dios que no he hecho una película donde interprete a un violador de niños, porque sino las madres me tirarían piedras en las puertas de los colegios", refiere.

"Cuando hice ‘El Día de la Bestia' (con Álex de la Iglesia) creían que el Heavy Metal era mi vida, y en las fiestas me ofrecían drogas. Que te confundan con James Bond está bien, porque es un tipo cool y toma Dry Martini...pero que te confundan con un tío como Torrente, que vomita en los bares y se tira pedos, es otra cosa. Me imagino a Boris Karloff paseando por el aeropuerto y la gente gritándole ‘eh, Frankenstein', es muy feo", ríe.

Posteriormente y sobre su relación con el ya mencionado Álx de la iglesia, con quien ha compartido numerosos proyectos, siendo el último hasta la fecha el film Mi gran noche, estrenado en España a fines del año pasado, dice lo siguiente

"Mi relación con Álex es terrible. Yo deseo trabajar con él pero lo tengo que forzar, y cuando ya no le queda más remedio me da un papel. Me cuesta, le tengo que retorcer el brazo. Una persona coherente me llamaría directamente o pensaría en mí mientras escribe sus guiones, pero siempre tengo que perseguirlo, golpearle la puerta, mandarle mensajes. Es un amor no correspondido, pero así es la vida," ríe, recordando que "gracias a Álex hice mis películas".

"Le digo que quiero ser como De Niro para Scorsese, pero al final, Scorsese está con Di Caprio, así que esto del amor siempre es lo mismo: te cambian por una más joven", bromea.

En cuanto a la gala del domingo, considera que será un evento divertido ya que "Natalia es una bomba, una chica muy carismática, chispeante, muy guapa. Y luego está Adal Ramone, que no tiene nada de eso, y yo, que ni sé que hago (ríe). Quería viajar a Uruguay y lo he conseguido. No conocía Punta del Este y ya veo que es precioso".

La mención al balneario dio pie para recordar su anterior visita a Uruguay "donde me tienen mucho cariño".

"En Montevideo hay un bar llamado Torrente, eso me impresionó. Mi historia con Uruguay y Argentina es como el documental Searching for Sugar Man, el del tipo al que le quieren mucho en un país lejano y él ni se entera hasta más tarde. Me pasa aquí y en Hungría, donde tampoco me había enterado de que Torrente era un megaéxito ¿Por qué en Hungría?, no lo sé, pero tuve que aprenderme lo de las pajillas y todo eso en húngaro para hacerme el simpático en los programas" recuerda.

En cuanto a la posibilidad de una nueva entrega de la saga Torrente, el cineasta no lo descarta pero tampoco se muestra entusiasmado al respecto.

"Me gustaría, pero la última no funcionó tan bien como las anteriores y eso me deprime. Yo soy de emociones muy simples. Me pegan y lloro, me acarician y me pongo contento. Dejas dos años de tu vida para hacer una película y te dices ‘esta les va a encantar', metes muchos chistes y escenas de acción mucho mejores que en las otras, y luego resulta un éxito tibio..."

De cualquier manera, Torrente todavía no ha dicho su última palabra ni hecho su última canallada. "Como el personaje me gusta y da mucho de sí, creo que haré una película crepuscular de Torrente. Dentro de diez años cuando ya este acabado haré una película de él regresando como Rocky Balboa", anuncia.

Como gran aficionado a la historieta y coleccionista de cómics, Segura disfrutó en 2010 la ocasión de protagonizar El Gran Vázquez, un film de Óscar Aibar acerca de la vida del historietista Manuel Vázquez Gallego, fallecido en 1995, y que en los años sesenta creó personajes icónicos como Anacleto agente secreto, Las hermanas Gilda o el Tío Vázquez.

"Me gustó mucho el papel y fue una película diferente, porque nunca me había tocado interpretar a alguien que había existido realmente, hacer una biopic, y es además una de las películas más serias que he hecho, porque no es una comedia propiamente dicha, sino una tragicomedia. También supuse que iba a ser mi lanzamiento serio, pero efectivamente me equivoqué", vuelve a reír.

En cuanto a esa ‘anhelada seriedad', recuerda que su rol en la serie Supermax, que acaba de rodar baja la dirección del argentino Daniel Burman, sí encarna un personaje serio "o lo era hasta que lo empecé a hacer yo".

Creo que va estar divertido, es una serie potente, con medios, como se hacen ahora las series en HBO, Netflix, etc. Allí soy conductor de un reality dentro de una prisión de máxima seguridad situada en medio de un desierto de sal, lejos de todo. Meten a los personajes y a mí, que soy el conductor y que pienso que será todo muy divertido, hasta que cortan la comunicación y aíslan el sitio del resto del mundo.

En esa serie, coproducción internacional rodada en Brasil, Segura comparte escena con Cecilia Roth y César Troncoso.

Por Gerardo Carrasco
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