Handball: Miguel Berger, el DT de bronce

Miguel Ángel Berger, entrenador de la selección uruguaya de handball femenino, dialogó con Montevideo Portal sobre lo que fue la participación del equipo que dirige en Toronto.

Desde el impacto por el partido ganado ante una potencia como Cuba, el conocimiento de años de varias de las jugadoras actuales de la selección y la expectativa de que alguna día se reconozca su tarea y no le descuenten del sueldo cuando le toca viajar al exterior, Berger tocó varios temas.

- ¿De qué manera viven el logro de la medalla en Toronto con el paso de los días y las distinciones que le han hecho desde su llegada?

La verdad que nunca hubiésemos pensado que obtener esta medalla iba a repercutir tanto. Lo que es la prensa, ¿no? Porque hemos obtenido otras cosas como clasificaciones a Mundial Juvenil y Junior. Hemos salidos vicecampeones panamericanos en ambas categorías. Pero esta medalla de bronce, con el partido emitido en vivo, con la victoria ante Cuba por primera vez, la repercusión que ha tenido en la gente es muy emocionante y a pesar de que pasan los días todavía no lo podemos creer.

- ¿Cómo se puede explicar realmente lo que significa el triunfo ante Cuba en la fase de grupo? ¿Con qué es comparable?

Ni nosotros podemos todavía catalogar la dimensión que tiene esto. Pero voy a decir un par de cosas. Cuba es la primera vez que participa y no está en el podio. En todos los Juegos Panamericanos que había participado había ganado alguna medalla. Son jugadoras que están entrenando todo el año para eso. El deporte cubano todos lo conocemos. Pero voy más allá, no solo Cuba, Argentina por primera vez clasifica a un Juego Olímpico gracias a nosotros, porque ellas no pudieron ganarle a Cuba. Y eso les significó aumento de becas para las jugadoras y aumento de sueldo para los técnicos. Entonces la dimensión es monumental. El logro se fue dando, estábamos fuertes. En el Panamericano de Handball habíamos perdido contra Argentina por quince y contra Cuba también, pero no habíamos ido de la mejor forma.

- ¿El partido en sí cómo se fue desarrollando?

Empezamos un poco flojas, íbamos perdiendo por 3, 4 goles. Lo remontamos. Creo que Cuba nos subestimó en el primer tiempo, nos dejó agrandar. Nos fuimos con un gol arriba y en el segundo tiempo cuando nos quisimos acordar las jugadoras estaban gigantes. Esos partidos que meten como caballas y sale todo. Salió todo lo que habíamos planificado de la mejor manera, fue el mejor partido que jugamos y se obtuvo ese logro tan importante.

Uruguay llegó a los Panamericanos con solo un amistoso internacional al debut. Ese primer partido donde perdió por tan solo cinco goles ante Argentina, "tipas que son profesionales y entrenan desde hace tres años", según cuenta Miguel, dio la fortaleza para luego ganarle a Chile en la segunda fecha.

- Además de la solidez en lo anímico y mental, en cuanto al juego, para alcanzar el nivel mostrado, ¿Cuál fue la apuesta de Uruguay?

Primero es convencer a las jugadoras que se puede jugar de igual a igual. Si las jugadoras no están convencidas, si entran ya achicadas en el buen sentido de la palabra y no lo hacen con la convicción de que se puede jugar así, es muy difícil. Después estar entrenadas para eso, soportar esa carga física, esa carga mental, trasladarla adentro del partido y tener un sistema apropiado para bajarle el goleo a ellas. Lo hemos logrado. Nuestra defensa abierta con presión hace equivocar mucho al rival. No están acostumbrados. Marcan generalmente 6-0, 5-1. Todo eso más las buenas actuaciones de las jugadoras, porque sino tenés el rendimiento de los deportistas no podés lograr nada. Tiene que haber una conjunción de todo eso y en este momento se logró.

- El destaque es para todo el plantel, pero ¿cómo se analiza lo de Martina Barreiro otra vez entre las máximas goleadoras de un torneo internacional?

Es una jugadora fuera de serie, junto con Camila, la hermana. 18 años tiene Martina, Camila tiene 21. Está Alejandra Scarrone con esa misma edad. Paola Santos con 18, Camila Vázquez con 19, Viviana Ferrari con 22. Ellas eran la base de la Junior del año pasado que le ganamos a Brasil. Y le pusimos la experiencia al lado. Lo de Martina, Alejandra y Camila es fuera de serie como te dije. Lo único que hay que hacer es tratar de seguir potenciándolo y que sigan creciendo. Yo creo que en cualquier momento se va a ir (Martina). Ya la vinieron a buscar de Brasil y creo que podría hacer una excelente carrera profesional afuera.

- A ese grupo base de jugadoras, ¿las dirige desde muy chicas, no?

Ellas tenían condiciones físicas innatas de velocidad y potencia. Nosotros lo que hicimos fue fortalecer eso, potenciar eso. Darle técnica. Yo las dirijo desde que tenían 7, 8 años. También tengo a Daniela Scarrone desde los 13. Empezamos en Olimpia, luego UGAB, Islas Canarias y ahora estamos en Goes. Entonces son muchos años de conocimiento y de crecer con las jugadoras. Porque ellas crecieron y yo también crecí. Muchas veces hay jugadoras con potencial pero si no trabajas la técnica y si la jugadora no quiere mejorar ese potencial no podés hacer nada. Yo he tenido jugadoras de un potencial enorme, quizás igual o más que Martina, pero por su cabecita, no querían entrenar ni esforzarse y ahí quedaron. La que entrena todos los días como la mejor para cualquier técnico es una satisfacción.

- Trascendió también que tuvo algunas complicaciones laborales con repercusión en lo económico por la ida a los Panamericanos, ¿Qué tan así fue?

Nosotros lo hacemos porque nos gusta esto, hicimos mucho sacrificio, siempre trabajamos honorario. Pero siempre con la perspectiva de mejorar y que alguna vez se nos reconozca y se empiece a valorar desde el trabajo que hacemos. Esto para todos los demás técnicos y todos los demás deportes., porque hoy estamos nosotros pero mañana está otro. Lo importante es que se empiece a reconocer esta tarea y principalmente lo que yo digo siempre, no perder plata. A mí me vienen descontando algo por estar representando a Uruguay, trabajando en un empleo público, cosa que a todo el mundo le dan licencia con goce de sueldo, a mí se me descuenta. Lo único que pido es que no se me descuente, que se me devuelva lo que me descontaron y que si hay alguna posibilidad de que realizar esta actividad remunerada, mejor.

Luis Silva I Montevideo Portal